Tirada en el sofá, con una sonrisa en la boca, y los labios cortados de tanto reír. Las cosquillas desprenden un agradable sabor al que todavía no has podido acostumbrarte. Los hielos derretidos han echado a perder los malos recuerdos que te quedaban, y tú los olvidas fácilmente, hasta la última gota. Tan sólo la luz del sol alumbra el pequeño salón. Están haciendo una película peculiar. Chico conoce chica, chica tiene un sueño, chico lucha con ella, chico y chica huelen a libertad, mundo de todos feliz, bonito y perfecto. Te gustan esas historias, y sonríes con ellas. Te agradaría ser la protagonista de un cuento similar algún día. Intentas no olvidar esa meta, gritando unos versos de más. De fondo, los acordes de un tal Iniesta reviven los segundos. Acéptalo. Tu vida también es bonita. Nuestra vida también es bonita.